En documento emanado por Alexander Cameron y fechado en Edimburgo el 26 de noviembre de 1808, el Obispo de Maximiniapolis y vicario Apostólico en las Low Lands del Reino de Escocia, indica que el joven Jaime Arbuthnot fué alumno del Colegio de Escoceses de Valladolid y nació el 24 de diciembre de 1791[1]. De cuyo bautismo Cameron no duda dado el testimmonio del Misionero de Edimburgo, del padre del niño, el barón e ilustre Guillermo Arbuthnot y de la piadosa y noble abuela de Jacobo.
Se indica también que se envió a España para realizar estudios[2].
El documento fué escrito en latín y traducido al castellano. Da fé de la buena traducción el profesor de lenguas de Valladolid Luís Giráldez en 1827[3].
En la Guerra de la Independencia Jaime de Arbuthnot en 1808 es ya un joven oficial (17 años), Teniente del Regimiento Infante don Carlos, regimiento ligero denominado también Cazadores (con la cornetilla como emblema) que le dará experiencia para América, donde servirá en los Cazadores de Castilla.
En los primeros meses de la Guerra está destacado en los montes de Cantabria, donde el general Bonet controla la columna vertebral de la región en forma de T; Esto es: Desde Santander hacia Oriente (Santaño y Laredo); Desde Santander hacia Asturias (San Vicente de la Barquera); y desde Santander hacia Castilla (con las plazas de Torrelavega y Reinosa).
Este eje estaba amenazado por la presencia del Armamento Cantábrico de Porlier, luego transformado en la División Cántabra, a la izquierda; y las guerrillas de Campillo y navarras de Espoz y Mina. Tanto Porlier como Espoz y Mina yacen junto a Arbuthnot en el cementerio de San Amaro[4].
El 19 de Noviembre el teniente Arbuthnot participa en escaramuzas ocurridas a la izquierda de este dispositivo, concretamente en la acción de San Vicente de la Barquera.
En 1809 caerá por primera vez en su vida (no será ni mucho menos la última) preso al ser sorprendido por las tropas de Bonnet en Santander el 26 de agosto. Sin embargo el 29 logra huír incorprándose de inmediato a las banderas de su regimiento.
En los primeros dias de 1810 el Emperador de los Franceses Napoleón ordena a Bonnet avanzar sobre Asturias y tomar Oviedo. Los franceses arrollan las tropas del General Llano Ponte. Esta amenaza obligará a la Junta asturiana a abandonar Oviedo y pasar a Grado. El 31 de enero los franceses entran en Oviedo y el 1 de febrero toman Gijón.
Las ordenes del Ejército Español son ahora fortificarse en el margen izquierdo del río Nalón, mientras la División Cántabra de Porlier trata de maniobrar en ayuda de los asturianos.
Este movimiento de Porlier anima a Bonnet a realizar un movimiento genial que desconcertará a las tropas españolas. Ante su no segura situación en Oviedo, abandona la capital asturiana y retrocede hacia Pola de Siero. El General Llano Ponte cree que los franceses se retiran y muerde el anzuelo avanzando y entrando triunfalmente en Oviedo, mientras las tropas de Pedro de la Bárcena, entre las cuales está el regimiento del Infante del teniente Arbuthnot, persiguen solas a los franceses.
El 14 de febrero las tropas de Bárcena cruzan el puente del Colloto en medio de la nieve y de la niebla. Los franceses atacan y sorprenden totalmente a los españoles. La irresponsabilidad de Llano Ponte hace que Bonnet no solo vuelva a entrar en Oviedo sino que desmantele todo el entramado defensivo del Nalón ocupando también Grado. La resistencia se retira al río Navia, muy cerca de ya la provincia de Mondoñedo en el Reino de Galicia.
En la acción desgraciada del Colloto el teniente Arbuthnot cae prisionero y será trasladado a Francia, o quizás a Flandes, que en ese momento es parte del Imperio. Tenía 19 años. La Guerra de la Independencia se terminará para él. Será liberado en 1815, con 24 años.
UN TEXTO DE SUSO MARTÍNEZ
[1] Fué bautizado según el rito el día después, indicando que en ese tiempo los niños no siempre se bautizaban en iglesias ni se expresaban en los libros de registro
[2] Documentación que se aporta junto a la Hoja de Servicios del Mariscal Jaime de Arbuthnot y Arbuthnot.
[3] Se realizó para su boda en Valladolid con María de los Dolores el 19 de diciembre de 1828.
[4] Las cenizas de Porlier en algún lugar de la fosa común y en el nicho de la ilustre promujer coruñesa Juana de Vega, el corazón de Mina. San Amaro.Memoria de un bicentenario. A Coruña, 2012.